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Siempre es recordada
aquella frase “Amar es darlo todo sin pedir nada a cambio”… De esa
anónima entrega y sacrificio saben muchos nuestros Militares…
El 16 de Abril de 2010, las
montañas escarpadas de Fond Verrettes,
en el deforestado sureste haitiano, han sido el trágico escenario del accidente
de helicóptero en el que han perdido la vida cuatro militares españoles. La
escasa visibilidad fue la causa más que probable del accidente, en la misma
zona próxima a la frontera con la República Dominicana- en la que perdieron la
vida en Octubre de 2009 los once tripulantes de una avión Casa-212 de
fabricación española.
Los militares fallecidos
viajaban en un Agusta Bell 212, un viejo modelo de helicóptero de los años 70.
Regresaban a la localidad de Petit Goave, al oeste de Puerto Príncipe, donde se
hallaban estacionados desde el 4 de Febrero de ese año los 423 efectivos de la denominada
Agrupación Táctica “Hispaniola”,
participando en la ayuda humanitaria a Haití y en la reconstrucción del
país tras el terremoto
del 12 de Enero
de 2010.
El Ministerio de Defensa ha
confirmado el accidente y ha facilitado el nombre de los fallecidos, todos
ellos casados y con hijos. Se trata de Luis
Fernando Torija Sagospe, de 44 años, natural de Madrid y
comandante del Cuerpo de Intendencia. Francisco
Forne Calderón, de 37, nacido en Barcelona, teniente de
Infantería de Marina. Manuel
Dormido Garrosa, de 35 años, alférez de navío y nacido en
Valencia, y Eusebio Villatoro
Costa, de 41 años, gaditano y cabo mayor de Infantería de
Marina, viajaban también en el helicóptero siniestrado.
El accidente se produjo cuando faltaban apenas tres semanas para completar
la misión. El Ministerio de Defensa no tenía intención de prolongar la estancia
y el buque de Asalto Anfibio “Castilla” había previsto levantar el ancla
en el mes de Mayo. El “Castilla” había zarpado el 22 de Enero de la base
naval de Rota, en Cádiz y, a petición de Naciones Unidas, desarrollaba su
misión en Petit Goave -a unos 70
kilómetros de Puerto Príncipe-, una de las ciudades que más sufrió los efectos
de la tragedia. El contingente estaba compuesto por 423 efectivos, entre los
que había 165 Infantes de Marina. En el buque iba también una unidad aérea
compuesta por un helicóptero Sikorsky SH-3D y tres Agusta Bell AB-212 de la
flotilla de aeronaves de la Armada con sede en Rota.
Los militares españoles desplegados en Haití están llevando a cabo desde el
4 de Febrero de 2010 labores de reconstrucción y ayuda, sobre todo sanitarias y
de distribución y producción de agua potable, así como trabajos de desescombro
en las calles. La Agrupación Táctica española está desplegada a través del
buque “Castilla” y bajo la coordinación del capitán de navío Francisco Pañuelas, comandante de este
buque y jefe de la “Operación Hispaniola”. Como se ha indicado
anteriormente, tenía previsto permanecer en aquel país hasta el 4 de Mayo. Este
accidente no era el primero que se producía dentro de la Misión: El día 10 de
Abril, dos miembros de la Agrupación “Hispaniola” resultaron heridos en
Haití al volcar el camión en el que viajaban. Las víctimas eran dos cabos
primero que padecieron politraumatismos, siendo ambos operados en “Castilla”.
Con estas cuatro muertes en Haití ascendían a 160
los miembros del Ejército y de las fuerzas de seguridad españolas, además de
dos intérpretes extranjeros que les acompañaban, que habían muerto desde 1987
mientras cumplían misiones en el exterior.
El helicóptero accidentado estaba concebido para misiones de transporte
táctico de personal, traslado de cargas, lanzamiento de paracaidistas, aero-evacuación
medicalizada y que también se utiliza para labores de mando y control. Capaz de
alcanzar una velocidad de 100 nudos a plena carga, tiene una autonomía de vuelo
de casi dos horas y puede operar a un máximo de 20.000 pies de altura, unos
6.000 metros (el helicóptero está dotado con dos motores de 900 caballos de
vapor cada uno y tiene un sistema de estabilización automático).
La ministra de Defensa, Carme Chacón, se desplazaba a Haití para traer los
cuerpos de los militares de vuelta a España y conocer de primera mano los
detalles del accidente aéreo. El helicóptero siniestrado perdió contacto con
otros dos helicópteros que participaban en la misma misión de abastecimiento
desde la República Dominicana.
Efectivos del Ejército de Estados Unidos localizaron los cuerpos sin vida
de los militares. Según confirmaba el embajador de España, Paulino Fernández,
militares españoles trabajaron duramente en la recuperación de los cuerpos ya
que al parecer estos se encontraban en "muy mal estado",
indicaba el diplomático que añadía que "al caer la noche, no se podía
hacer más". Tras el levantamiento de cadáveres, los cuerpos fueron
trasladados al “Castilla”, fondeado en las costas de Petit Goave.
El trágico accidente se produjo a escasos kilómetros de la remota aldea fronteriza
de Fond Verrettes, donde trabajaba la ONG española Cesal, implicada en un proyecto de desarrollo rural y soberanía
alimentaria. Jorge Calero,
cooperante de Cesal, comentaba –muy fuera de lugar- que “el revuelo
incesante de helicópteros ha alterado la habitual placidez de Verrettes”,
que fue arrasada en el 2004 por un ciclón. Simplista comentario cuando esos
helicópteros volaban precisamente para mejorar las condiciones de vida de los
haitianos… Y es que, a veces, el árbol no te deja ver el bosque.
Características generales:
Tripulación: 1 (dos para
operaciones IFR[1]).
Capacidad: 14.
Longitud: 17,43 metros.
Diámetro del
rotor: 14,64 metros.
Altura: 3,83 metros
Área Discoidal: 168,3 m².
Peso en vacío: 2.961,7 kg.
Peso Máximo de
Despegue: 5.080 kg.
Motor: 1 × Pratt & Whitney Canada PT6T-3 or
-3B turboshaft, 1,800 shp (1,342 kW).
Velocidad de
Crucero: 100 nudos (115 mph, 186 km/h).
Alcance: 237 nudos
náuticos (439 km).
Ascensión: 532 m/min.
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