“Son soldados nada más,
por el cielo volarán,
llevarán Boinas Verdes
y el valor no les faltará.
Sobre el pecho alas de plata
desde el cielo saltarán,
más de cien hoy probarán
pero tres tan solo valdrán.
Cuerpo a cuerpo lucharán
noche y día por la paz,
llevarán Boinas Verdes
y al morir todo la honrarán.
Una esposa en cada hogar
solitaria llorará,
por aquel Boina Verde
que jamás ya volverá.
Pero el fin no llegará,
al morir, sus hijos vendrán,
llevarán Boinas Verdes
para luchar por la libertad”
(Sargento Barry Sadler: “Balada de los Boinas Verdes”).
“Es duro, muy duro. Es un Boina
Verde” (David Morrell: “Primera
Sangre”). El cine estadounidense –cómo no- nos ha enseñado hasta la
extenuación lo portentosos que son sus Fuerzas Especiales: Chuck Norris y un
perdidísimo Lee Marvin en horas bajas en aquel bodrio titulado “Delta Force”,
la actual moda de los Navy SEAL, con multitud de títulos que nos vienen a todos
a la cabeza (siendo el último “The Lone Survivor”), John Wayne tratando
de hacer un homenaje de los Boinas Verdes en la película homónima[1]
(y que casi termina caricaturizándolos, en ese sucedáneo de western en la
jungla vietnamita. Lástima de muy buen libro en el que se basaba la cinta). Hollywood
tiene a John Rambo (todo un icono), al Equipo A. Pero en España seguimos
avergonzándonos de retratar a nuestras Fuerzas Armadas en la cinematografía
actual, como no sea para vituperarlos en plan progre (véase Daniel Calparsoro y
sus “Guerreros” -2002- e “Invasor” -2012-). Parece que el
enorgullecerse cinematográficamente de nuestro Ejército trae recuerdos de “otras
épocas” (ustedes ya me entienden). Pero, lo triste es que podríamos rodar
kilómetros de metraje narrando las actividades de nuestras Unidades: Dinámicas,
efectivas, eficientes… Como nuestros guerrilleros (qué término tan ibérico),
que acaban de cumplir su medio siglo de existencia.
Este artículo va por ellos (porque llevar la Boina Verde es un honor
y un privilegio no alcanzado por muchos)…
La idea de crear Unidades de Operaciones Especiales nace en la Escuela Militar de Montaña, cuando propone iniciar un curso para diplomar a los mandos de las futuras
unidades, que debían organizarse según un razonamiento basado en la profusión
de la lucha de guerrillas.
Ya en 1808
los franceses bautizaron como “Petit
Gerre” la que a su ejército le
hacían en España las partidas y cuadrillas de patriotas. El término se
generalizó y transformado en guerrilla acabaría por popularizarse en todo el
mundo.
“Las
guerrillas son la sorpresa y para que haya choque es preciso que una de las dos
partes ignore la proximidad de la otra”. Los mismos franceses, como el
oficial de la Guardia de Corps, Hayles nos dejaron constancia del quehacer
guerrillero: El pueblo entero se veía encarnado en ellos como la manifestación
más española de la lucha, y cuanto podía hacer por ayudarles, otro tanto hacía.
Las órdenes de los guerrilleros eran obedecidas sin discusión; para servirles
todo habitante estaba pronto a ser correo o espía, cuando encontraban ocasión
de batirse a su lado lo hacían sin vacilar” Por otro lado, visto lo provechoso
de su forma de combatir, se legaliza por primera vez en España, a las Unidades
Guerrilleras de nuestra historia mediante la publicación del Reglamento de
Partidas y Cuadrillas de 28 de Diciembre de 1808 y después el Decreto del Curso
Terrestre de 17 de Abril de 1809 donde se reconocía a los guerrilleros , aunque
fuera del contexto del ejército nacional, con el propósito de coordinar sus
acciones hacia un mismo fin: la expulsión del invasor.
Así es como el 14
de Enero de 1957 se desarrolla en esa EMM de Jaca el primer curso de aptitud
para el Mando de Unidades Guerrilleras, dividiéndose en 2 fases. Este primer
grupo de profesionales forjados en el conocimiento de técnicas específicas y
adecuadas para el combate de guerrillas en todo el territorio nacional, comenzó
a trabajar en este tipo de actividades, siendo el teniente Baranda el primer
diplomado caído durante unas maniobras en Albacete en el año 1959.
El 13 de
Diciembre de 1961, finalizado el IV curso y en consecuencia cuando ya se
contaba con suficientes mandos para formar la primera Unidad Guerrillera, el
Estado Mayor Central del Ejercito de Tierra dicta por orden del ministro
Barroso, la Instrucción General nº 161-125, emanada de la 1ª Sección, en la
Dirección General de Organización y Campaña, en la que se dan normas para la
creación experimental de las dos primeras UNIDADES
DE OPERACIONES ESPECIALES (con una plantilla teórica de 113 hombres a las órdenes de
un capitán y distribuidos en Mando, Plana Mayor y tres secciones, se les asignó
a cada uno un armamento específico: fusil de asalto o subfusil, semiautomática
y un cuchillo especial, amén de una veintena de fusiles de precisión de
dotación general), de ellas la nº 71[2]
se encuadraría administrativamente en la Agrupación de Infantería Milán nº 3 en
Oviedo y con dependencia táctica de la División Oviedo 71. Y la Unidad de
Operaciones Especiales nº 81 dependiendo en los mismos términos de la
Agrupación Zamora nº 8 en Orense y de la División nº 81. Todo el personal de
tropa era voluntario, aunque debían superar unas pruebas de selección y el
compromiso era por el tiempo en que el reemplazo permaneciese en filas,
facilitándoseles el reenganche si lo deseaban.
El día 8 de Diciembre de 1962, en
la conmemoración de la festividad de la Inmaculada Concepción, patrona del arma
de Infantería, la UOE nº 71 estrenaba su Boina Verde[3], símbolo por
excelencia de estas Unidades, prenda que hermana a todos los hombres que la
llevan y marca un peculiar estilo de vida militar, girando en torno a ella
todos los valores morales del soldado de UOE,
heredero de las virtudes guerrilleras de antaño.
Con una actividad diaria continuada y
orientada a su actividad específica, llegó el momento de implantar este tipo de
compañías en el Ejército, lo que tuvo lugar con la promulgación de la IG
165-142 del EMC de “Reorganización del Ejército” fechada el 10 de Julio
de 1965. Esta IG propugnaba unos medios operativos novedosos que incluían una
Brigada de Defensa Operativa del Territorio (BRIDOT) en cada una de las
regiones militares. En éstas se incluían tres regimientos que,
administrativamente, encuadraban una UOE en cada uno de ellos. El 1 de
Noviembre de 1965 se creó la UOE nº 72 con sede en Gijón y asignada al
Regimiento de Infantería Simancas nº 4.
El 1 de Agosto
de 1966 se desarrolla la IG 165/142 en lo referente a la organización de las
Compañías de Operaciones Especiales especificando la creación de una compañía,
en cada uno de los Regimientos de infantería de las Brigadas de Defensa
Operativa del Territorio (BRIDOT), con el nombre de COMPAÑÍAS DE
OPERACIONES ESPECIALES (lo que tuvo lugar en Septiembre de ese año, y desde
entonces se constituyeron diversas COE con dependencia administrativa de varios
regimientos), llegando a
formarse hasta 20 compañías[4],
que luego se ampliarían al crearse las COE 101 en Palma Mallorca, la 102 en
Tenerife, y la 103 en Canarias, esta última en 1.976. Tres años después, se
decide agrupar dichas COE[5],
pasando a denominarse GRUPOS DE
OPERACIONES ESPECIALES (con fecha de 2 de Mayo del 79 nacía el GOE I en
la Base de San Pedro apareciendo, por primera vez una Unidad de Operaciones
Especiales tipo Batallón[6]).
La década de
los 80 con el plan META en el que se incluía la disolución de las BRIDOT y la
reducción de las Regiones Militares, supone una transformación del proceso para
las COE cerrándolo para muchas de ellas que serán disueltas o cambiarían de
guarnición para integrarse en una unidad superior el Grupo de Operaciones
Especiales.
En Octubre de 1997,
se publica la Orden Ministerial de creación del MANDO DE OPERACIONES ESPECIALES[7]
(MOE), que se activa el 1 de Julio de 1998 y que reúne, bajo su mando, los dos
Grupos de Operaciones Especiales “Valencia” III y “Tercio del
Ampurdán” IV y la XIX Bandera de Operaciones Especiales de la Legión
(BOEL). Su primer Jefe será el Coronel
D. Fernando Sancho De Sopranis Andújar estableciendo primeramente la
Jefatura del MOE en Jaca para -a finales del 99- trasladarla a su nueva ubicación en
Rabasa (Alicante).
Los Grupos de Operaciones
Especiales (GOE) son las unidades de operaciones especiales del Ejército de
Tierra español, los denominados Boinas
Verdes. Inicialmente se
destinaban principalmente al combate de guerrillas, pero en la actualidad su
función es de misiones de infiltración y reconocimiento por cualquier medio
para la vigilancia u observación o ataques concretos, siempre en pequeños
grupos (12-16 hombres más o menos) y siempre detrás de las líneas enemigas.
Otro tipo de misiones en las que participa son las llamadas operaciones NEO (Non-combatant
Evacuation Operation, Operación de Evacuación de No-combatientes),
consistentes en la ayuda o extracción en países extranjeros, normalmente en
conflicto, a compatriotas, bien para su evacuación inmediata o su puesta a
salvo. También actúan como asesores y fuerza multiplicadora. Los GOE españoles
están considerados como una de las cuatro unidades de operaciones especiales
más operativas de la OTAN junto con la Legión Extranjera francesa, el SAS
británico y los estadounidenses SEAL y Delta Force. En los años 2007 y 2012,
las Fuerzas Armadas españolas proporcionaron el Mando Componente de Operaciones
Especiales de las fuerzas de reacción de la OTAN (NRF), integrando unidades de
los tres ejércitos junto con otras aliadas.
Algunos de sus hombres son
expertos en operaciones encubiertas por todo el mundo, como demuestran sus
acciones en Sudamérica, África y Asia. Además de por su absoluta discreción, los GOE se
caracterizan por cumplir con sus cometidos movilizando un reducido número de
soldados si se compara con el trabajo de otras unidades. A toro pasado, se
puede decir que su participación fue clave, por ejemplo, en el desalojo del
islote de Perejil, cuya ocupación tensó las relaciones entre Marruecos y España
en el verano de 2002. Conocido es también el papel de estos 'guerrilleros' en
misiones en el exterior, como Bosnia, Kosovo, Mozambique, Irak y, más
recientemente, Afganistán y El Líbano.
Existen actualmente tres unidades
GOE dentro del Ejército de Tierra Español (subordinadas al MOE): GOE. "Valencia"
III (ubicado en Alicante), GOE. "Tercio del Ampurdán" IV (acuartelado
en Barcelona) y GOE. "Caballero Legionario Maderal Oleaga" XIX
(antigua Bandera de Operaciones Especiales de la Legión, BOEL, actualmente
también ubicado en Alicante). Una unidad GOE se divide en equipos operativos de
12-16 soldados, suboficiales y oficiales (aunque su estructura
orgánica modular les permite constituir patrullas de reconocimiento especial y
equipos básicos u operativos de acción directa, compuestos por un máximo de
seis individuos -un capitán o teniente como jefe, un sargento como segundo jefe
y un cabo primero, un cabo y dos soldados profesionales-). Normalmente cada equipo operativo es dirigido por
un capitán y a su vez un comandante se encarga de coordinar los diferentes
equipos operativos dentro de cada unidad G.O.E. Las unidades son mandadas por
un teniente coronel.
Cada GOE dispone de la unidad
sección de Plana Mayor, formada por oficiales, suboficiales y soldados, los
cuales se dedican a dar apoyo logístico a las compañías operativas,
suministrando material para diversas especialidades y entornos, armamento,
transporte-logística, avituallamiento, etc. El mando de los GOE está unificado
en el Mando de Operaciones Especiales (MOE.). Este es el encargado de dirigir
los tres grupos existentes. Al frente de él está el General Jefe del Mando de
Operaciones Especiales (GEMOE), actualmente el General Francisco Arribas Mir.
Servir en las
duras COE implica pasarse buena parte de los nueve meses de mili de
maniobras y ejercicios:, teoría de guerra, tiro, gimnasia, resistencia, tablas
de combate, reptar, lanzarse desde un acantilado, saltar desde camiones en
marcha. "No todo el mundo podía resistir”, explicaba D.M., quien
reconocía que sólo resistió hasta la fase de preadaptación. Más tarde viene la
adaptación, el trato prisionero, capturas, infiltraciones, rescates,
supervivencia, marchas nocturnas, ejercicios tácticos propios de un cuerpo de
trabajos en la vanguardia cerca de la línea de fuego y en campo enemigo.
Curso de Operaciones
Especiales.
Para formar parte de un equipo
operativo de una unidad G.O.E. hay que superar el Curso de Operaciones
Especiales, que consta de tres fases:
Curso de Paracaidismo Automático.
Generalmente hay que hacerlo en
la fase básica de formación militar y consiste en una fase teórica y 6 saltos
de paracaidismo automático desde los aviones CASA C-212 Aviocar, CASA CN-235,
CASA C-295 y Lockheed C-130 Hércules en la Escuela Militar de Paracaidismo
"Méndez Parada", en la Base Aérea de Alcantarilla ( Murcia).
Una vez superado el curso se obtiene la aptitud de cazador paracaidista.
Curso básico de Operaciones Especiales.
Es un curso cuya finalidad es efectuar
una criba para dejar tan sólo a los aspirantes más aptos. Para ello se les pone
al límite tanto física como psicológicamente mediante diferentes fases como:
endurecimiento, topografía, supervivencia, patrullaje, trato de prisionero de
guerra y la famosa prueba de la boina verde. Generalmente suele durar entre 5-6
meses y lo supera tan sólo alrededor del 30% de los aspirantes. Si se sale apto
de este curso se hace entrega en una ceremonia del denominado huevo o “Fred
Perry”, que es el emblema que identifica a los soldados con la aptitud
básica para el desempeño de funciones de operaciones especiales y se obtendrá
acceso para el curso siguiente.
“Aquí no hay superhombres.
Buscamos gente madura y con la cabeza bien amueblada, ni portentos físicos ni
descerebrados. En el equilibrio está la virtud”. Así se expresaba uno de
los instructores del curso de acceso a los Grupos de Operaciones Especiales
cuando aludía a los soldados que tienen su base en el cuartel alicantino “Alférez
Rojas Navarrete”. Ese proceso formativo, específico para esta tropa, dura
cinco meses y constituye sólo la primera criba para integrarse en una unidad de
élite del Ejército de Tierra español. “Sólo seis de cada diez aspirantes a
entrar en los GOE supera el curso inicial - explicaba el general jefe del
MOE, Adolfo Coloma-. Es un curso duro. No te voy a engañar. Se trabajan los
apartados físico, técnico y moral o psicológico. Tocamos muchos campos y,
técnicamente, hay que ser bueno en muchas cosas, algo que nos distingue del
resto de tropa”. A su juicio, las señas de identidad de los hombres y
mujeres (las menos, aunque algunas hay) de los GOE son “una altísima calidad
humana y un altísimo nivel técnico”. Entre las materias estudiadas por los
aspirantes, en un sentido teórico y práctico, figuran la topografía, el
armamento, el tiro, la escalada, cuidados sanitarios y transmisiones. Todo ello
aderezado con exigentes tablas de ejercicio físico. “Los hay que en pocos
días se dan cuenta de que esto no es lo suyo y lo dejan. No pasa nada, no es
ninguna vergüenza -comentaba el Teniente Instructor de la Capacitación-. Lo
más importante es que cada soldado conozca sus límites, que en una misión real
sepa si puede hacer algo o no, porque antes ya lo ha hecho aquí, en el cuartel”,
recalcaba.
Curso Avanzado de Operaciones Especiales.
Una vez aprobado el curso básico y con el curso de
paracaidista automático realizado se entra a formar parte de un equipo al que
se suele llamar el avanzado. El cometido del equipo avanzado es aprender a
trabajar dentro de un equipo operativo mediante diferentes fases y maniobras
como pueden ser reconocimiento de material, fase de nieve, agua, montaña
estival, etc. Este curso suele durar también entre 5-6 meses y durante este
periodo si el suboficial al cargo del personal del avanzado lo cree oportuno y
basándose en las aptitudes de cada miembro del avanzado se le destinará a un
equipo operativo específico. Completando su formación con:
·
Curso de apertura
automática con cargas diurno/nocturno.
·
Curso de plegado y
preparación de cargas.
·
Curso de señalador
guía.
·
Curso básico de
montaña invernal/estival.
·
Curso OFA/TACP
(Observador de Fuego Aéreo/Tactical Air Control Party, Grupo de Control
Aéreo Táctico).
·
Curso TCCC (Tactical
Combat Casualty Care, Atención a Bajas en Combate Táctico).
·
Curso de FAC (Forward
Air Controller, Controlador Aéreo Avanzado).
·
Cursos de adquisición
de Inteligencia Táctica.
·
Cursos de buceador
elemental y combate.
Únicamente cuando uno pertenece a
un equipo operativo del GOE se le destina para salir de misión de paz o de
combate, aunque esto último jamás sea reconocido por el gobierno de turno y aun
con numerosas bajas enemigas confirmadas ni se les haga mención ni se les
recompense de ninguna manera como en muchas ocasiones ha ocurrido en Afganistán
y/o en Iraq.
Completada la
instrucción básica, llega el momento de apostar por una especialidad. Todo
componente del GOE atesora avanzados conocimientos de buceo, montaña y
movilidad, entre otras disciplinas y maniobras de combate. Pero la
especialización de los soldados se acentúa mucho más en la tropa del
acuartelamiento de Alicante, por lo que el proceso formativo realmente siempre
está abierto, máxime cuando uno asciende al escalafón de mando. Los hay que son
capaces de alcanzar un objetivo de un disparo a una distancia de 1.000 metros,
mientras que otros llegan a nadar kilómetros, cargados con su material de
guerra en bolsas 'estanqueizadas', para sorprender al enemigo, mientras que
otros sobresalen como consumados escaladores. Nadie presume de ello, simplemente
lo hacen. En esta unidad no cabe el escaparate ni la fachada, sino que se
persigue el más estricto anonimato:
Agua.
Montaña.
CQB-MOUT, siglas en inglés de Close Quarters
Battle-Military Operations on Urban Terrain, Operaciones en
Espacios Cerrados-Operaciones Militares en Terreno Urbano.
Movilidad Táctica.
Tiradores de precisión.
El cuartel militar “Alférez
Rojas Navarrete” de Alicante es la base de Operaciones Especiales, aunque
la actividad allí resulta menos intensa de lo que uno puede imaginar. Ello se
debe a las rutinas de entrenamiento, que hacen que los equipos pasen muchos
días fuera de casa. En una misma semana, puede que distintas secciones de los
GOE se encuentren en Noruega, en el Círculo Polar Ártico, donde durante dos
semanas soportan temperaturas de más de 20 grados bajo cero, o en un lugar
perdido de la meseta castellana. Todo cabe para completar los ejercicios de
supervivencia, pericia en el manejo tecnológico y ensayos de tácticas de
combate o reconocimiento de territorio enemigo.
Cada servicio requiere de unas
destrezas potenciadas, según explican fuentes del cuartel militar de Rabasa.
Los expertos en agua siguen una exigente rutina de preparación diaria. “El
físico es fundamental, igual que en montaña. Hacemos 90 minutos de piscina,
carrera hasta la playa, más entrenamiento con el traje de neopreno. El agua es
un medio, pero no un objetivo concreto”, recuerda uno de los responsables
de grupo. Ello quiere decir que acceder a su destino es sólo la primera parte
de la misión. Por ello, sus prácticas incluyen inmersiones, uso de
embarcaciones con medios de la Armada, submarinos o helicópteros. Todo ello sin
descuidar los ejercicios de tiro y otras actividades diarias propias de los
GOE.
En las cumbres, cada soldado
adscrito a Montaña debe llevar entre su equipamiento obligatorio un emisor que,
en caso de ser víctima de un accidente, permite su localización, una sonda para
testar la nieve y una pala, por si urge habilitar un refugio. La seguridad
nunca se descuida, es crucial.
Los componentes de Movilidad
Táctica se adentran ampliamente en territorio hostil para efectuar
reconocimientos especiales, de localización de objetivos. “Lo de pasar a la
acción es decisión del mando”, aclara uno de sus coordinadores. Pueden
llegar a recorrer, siempre de noche, hasta 1.000 kilómetros en diez días. Se
conduce con visión nocturna y por terrenos complicados. “El vehículo, cuanto
más simple y mecánico, mejor”, subraya. En cualquier caso, todo
especialista deja claro un mismo mensaje: “Primero que todo, soy un miembro
de los Grupos de Operaciones Especiales”[8].
“Vamos cantando, cara al mañana,
La alegría de ser español.
Nuestra casa es la montaña,
Nuestro mirar hacia el sol.
Nos llaman los guerrilleros
Por la fuerza y el valor.
La patria defenderemos
Con denuedo y con amor.
Trabajo y compañerismo,
Lealtad y abnegación,
Disciplina y sacrificio
Nuestras virtudes son.
Guerrillero, guerrillero, guerrillero
Alerta debes estar
Para ser siempre el primero
Si es necesario luchar.
Si la suerte te depara
El recibir en tu entraña
Rosas de fuego y de sangre,
Piensa que fue por España.
Si el amanecer de un día
Vuela de tu cuerpo el alma
Será el cielo quien sonría
Como premio de tu hazaña.
Guerrillero, guerrillero, guerrillero
Alerta debes estar
Para ser siempre el primero
Si es necesario luchar”
(Himno de los Guerrilleros)
“No quiere aceptar el
hecho de que están enfrentándose a un hombre que es un experto en la lucha de
guerrillas. Ese hombre es excepcional... con armas de fuego, con el cuchillo,
¡con sus propias manos! Un hombre que está entrenado para ignorar el dolor, las
condiciones climatológicas... vivir de lo que da la tierra... comer cosas que
harían vomitar a una cabra. En Vietnam la misión de mis hombres era eliminar a
ciertos enemigos. ¡Matar! ¡PUNTO! Matar o morir... y Rambo era el mejor” (Ted Kotcheff: “Acorralado”, 1982).
Y es que, como ellos mismos bien
indican: “SOMOS ESPECIALES”.
[1] “The
Green Berets” (dirigida por John Wayne y Ray Kellogg en 1968).
[2] El 5 de Enero
de 1962 comenzó el proceso de captación de los integrantes de la UOE Nº 71, que
quedó formada del 1 de Marzo de ese mismo año por tres cabos primero, 19 cabos
y 70 soldados, a los que se añadirían cuatro oficiales y siete suboficiales.
[3] En las antiguas COE, como en todas las unidades posteriores de Operaciones
Especiales, para conseguir llevar la Boina Verde, había que superar un período de formación intenso, en el cual se incluía
todo lo anteriormente mencionado antes de pasar " LA PRUEBA DE BOINA ", tan famosa, y respetada, ello implicaba
una serie de pruebas consecutivas, donde se tenía que demostrar y realizar todo
lo aprendido en el período de formación, pero de una manera muy intensa,
y condiciones extremas de dureza, ya que las pruebas se hacían unas seguidas de
otras durante, a veces hasta una semana seguida de marchas, recorridos nocturnos,
tiro, supervivencia etc... Poco descanso y mucho pateo, y para culminar como
casi siempre, el trato de prisionero y como colofón un pasillo de fuego.
[4] Así,
la COE nº 11 dependía del Regimiento Inmemorial nº 1 de Madrid, la COE nº 12
del Regimiento Ordenes Militares nº 37 de Plasencia, la COE nº 21 del
Regimiento Álava nº 22 de Tarifa (Cádiz), la COE nº 22 del Regimiento Granada
nº 34 de Huelva, la COE nº 31 del Regimiento San Femando nº 11 de Alicante, la
COE nº 32 del Regimiento Guadalajara nº 20 de Paterna (Valencia), la COE nº 41
del Regimiento Jaén nº 25 de Barcelona, la COE nº 42 del Regimiento Badajoz nº
26 de Tarragona, la COE nº 51 del Regimiento Las Navas nº 12 de Zaragoza, la COE
nº 52 del Regimiento Barbastro nº 43 de Barbastro (Huesca), la COE nº 61 del
Regimiento San Marcial nº 7 de Burgos, la COE nº 62 del Regimiento Garellano nº
45 de Bilbao, la COE nº 71 del Regimiento Milán nº 3 de Oviedo, la COE nº 72
del Regimiento San Quintín nº 32 de Gijón, la COE nº 81 del Regimiento Zamora
nº 8 de Orense, la COE nº 82 de Lugo perteneciente al Regimiento Mérida nº 44
de El Ferrol, la COE nº 91 del Regimiento Córdoba nº 10 de Granada, y la COE nº
92 del Regimiento Ceuta nº 54 de Ronda (Málaga), totalizando 20 compañías.
Siguiendo unas premisas particulares en cuanto a doctrina de empleo y programas
de instrucción, fueron conformándose las anteriores hasta que estuvieron
organizadas en 1.969. Además se incluyeron nuevas unidades, constituyéndose la
COE nº 101 en el Regimiento Palma nº 47 de Palma de Mallorca, la nº 102 del
Regimiento Tenerife nº 49 de Tenerife, y la nº 103 del Regimiento Canarias nº
50 de las Palmas de Gran Canaria, que quedó constituida en Mayo de 1976.
[5] Así, entre los años 1966 y 1969
fueron apareciendo casi todas las COE siendo las dos últimas unidades creadas
la UOE de la Legión y la COE de la EMMOE: En 1981 nació la Unidad de Operaciones
Especiales Legionaria (UOEL), que se ubicó en Ronda y tomaba la experiencia
anterior contrastada por las Secciones de Operaciones Especiales (SOE) de los
Tercios, que tan afanosamente habían trabajado en las múltiples misiones que se
les habían encomendado durante los sucesos del Sahara entre los años 1970 y 1975.
Este hecho obligó al traslado de la COE 92 desde Ronda a Málaga. En Noviembre
de ese mismo año también se creó una COE en la sede de la Escuela Militar de
Montaña y Operaciones Especiales (EMMOE) de Jaca, que tenía como misión básica
constituir un núcleo de apoyo muy especializado para los diferentes cursos que
allí se impartían, a la vez que aprovechaba su capacitación para experimentarse
en los terrenos de alta montaña que rodean la Escuela; además constituyó un
núcleo importante para la experimentación de nuevos procedimientos y materiales
que luego se introducirían en el resto de unidades similares. Por esas fechas
se llegó a tener un número de 25 COE constituidas -el más alto nunca alcanzado en la
especialidad- que desde entonces fueron perdiendo volumen como consecuencia de
la adaptación a los continuos cambios programáticos de las fuerzas del Ejército
de Tierra (Planes META, RETO, NORTE, etc.).
[6] Para la
agrupación de diversas COE en este primer GOE se escogió a las nº 11 de Madrid
y nº 12 de Plasencia -ambas en la I Región Militar- situándolas, junto a una
Unidad de nueva creación, en la localidad de Colmenar Viejo (Madrid). En esta
organización, mandada por un teniente coronel -aunque el primero destinado a
este puesto fue el entonces comandante Evaristo Muñoz Mañero-, se constituyen
tres UOE numeradas 11, 12 y 13 y una Plana Mayor, constituyendo el mayor grupo
operativo de la especialidad de su momento en España en el que se evalúan
diversas organizaciones tácticas nuevas, siendo los resultados muy satisfactorios.
[7] El Mando de
Operaciones Especiales (MOE) estaba integrado en el Núcleo de Apoyo a la Fuerza
de Maniobra con la función de intervenir en determinadas misiones que, por sus
características, no podían ser asumidas por las unidades convencionales:
Operaciones de acción directa (ataque a objetivos críticos o su señalización
para el ataque aéreo, captura o recuperación de personal, guiado de misiles
inteligentes, etc.), reconocimiento especial (información sobre actividades
enemigas, localización de armas especiales, comprobación de daños producidos,
etc.) y asistencia militar (adiestramiento de fuerzas propias o aliadas,
ampliación del conflicto a retaguardia enemiga). Estas unidades además pueden
colaborar con otras en operaciones humanitarias, de apoyo a la paz, de
evacuación de personal no combatiente o de ayuda a la población civil ante
catástrofes. La Jefatura del MOE se compone de Plana Mayor de Mando, Compañía
de Plana Mayor y Unidad de Experiencias.
Estupendo articulo
ResponderEliminarUn buen resumen y excelente artículo.
ResponderEliminarOrgulloso de ser Boina Verde estoy.
ResponderEliminarServí en el GOE V COE 52. Mi reemplazo fue el 6º del 86 pero me licencié con el 2º del 87 (Voluntario de 16 meses).
Un saludo y un gran trabajo de investigación. Por cierto la COE en la que serví era la antigua COE 62 de Bilbao.
Gran información.
ResponderEliminarTengo una duda y es ¿se podría dar el caso de una misión que sólo la podría realizar un miembro?por ejemplo: un espía o algo parecido
Imposible, la unidad mínima de combate en operaciones especiales siempre es de dos, es el conocido binomio. Ese era tu compañero inseparable, que casi sabia antes que tu, si tenias ganas de cagar o tirarte un pedo.
EliminarPuede, suele y debe estar previsto que por cualquier motivo el binomio, o bien un miembro de un equipo más numeroso, quede aislado, en cuyo caso su rescate es prioritario para la Unidad, y éste está instruido en supervivencia, fuga y escape, orientación y comunicación. Espiar no forma parte del cometido de un boina verde, en principio. Un saludo.
EliminarUn saludo a todos los Boinas Verdes,yo soy del 83/84 C.O.E 42 Tarragona,siempre seremos grandes!!
ResponderEliminarSaludos a todos los Boinas Verdes yo soy del 5/90 del C.O.E. 32 de Alicante a ver si contacto con alguien de mi compañía coño
ResponderEliminarYo soy buceador de los Boinas Verdes del tercero del 79 Benga hombre haber so encuentro a halguien de else tiempo
ResponderEliminarsoy del 79-5º un saludo
Eliminarsigue en marcha el blog?
EliminarUn saludo a todos los boinas verdes yo estuve en el g.o.e.1en la 13 año 1988
ResponderEliminarBien agusto entre compañeros, yo estuve en la 13 en el 83-84. Un abrazo guerrillero a too quisque.
EliminarYo también estuve en la 13 colmenar viejo del 5/87
Eliminarservi a las ordenes de francisco arribas mir en el 86 cuando era capitan en la brigada de infanteria mecanizada 21 cerro muriano, 1ª compañia de fusileros´la persona mas justa que he conocido
ResponderEliminaralguien sabe el año del ultimo reemplazo en Goes del soldados de servicio obligatorió?
ResponderEliminarLa última asignación de destinos del Servicio Militar tuvo lugar el 8 de Noviembre de 2000 para los jóvenes del reemplazo del 2001, que se incorporaron a las Fuerzas Armadas a lo largo de los meses de Enero, Febrero y Marzo. El 31 de Diciembre se suspendía la "Mili" obligatoria, siendo profesionales todos los soldados y marineros desde el 1 de Enero de 2002. Gracias por tu participación.
EliminarSaludos a los veteranos deL C.O.E. 62 de Garellano, especialmente a los reemplazos del 78 y 79.
ResponderEliminarYo soy de 85 de la 12, colmenar viejo
ResponderEliminarMi hermano estuvo en la 11, en el año 86.
EliminarSoy de remplazo de 81. De la 102 de Santa cruz de Tenerife.
ResponderEliminarAlguien de ese remplazo
Servicio militar entre el 81/82 cabo de la COE 103 Las Palmas de Gran Canaria en el cuartel de Las Rehoyas
ResponderEliminarHola buenas,querría saber las capacidades físicas necesarias que se hacen en el curso,cuántos km recorren,si hay circuitos de fuerza etc, gracias
ResponderEliminarsoy del 1976 COE 41 reemplazo de abril,voluntario de 18 meses tiempos bonito para mi,un abrazo para todos los boinas verdes
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